Acompañamiento Terapéutico Individual

Acompañamiento terapéutico individual

Ponle voz a lo que sientes y necesitas, para ir hacia aquello que deseas

Si has llegado hasta aquí, seguramente te sientas identificado/a con algunas de las frases que aquí escribo;

  • La relación con tus padres no es tan buena como te gustaría y eso te pesa mucho en tu día a día.
  • Sientes que tienes «roles» en la familia que no te corresponden.
  • Sientes que tienes «un peso familiar fuerte» que no te deja «ser tu mismo/a». 
  • No sabes porqué, pero te cuesta mucho estar en pareja.
  • Te cuesta la intimidad en la pareja.
  • Dependes de tu pareja, o bien es un esfuerzo estar con ella.
  • No te gusta tu trabajo y el tiempo pasa y no haces nada.
  • No te atreves a decir y hacer lo que quieres y necesitas.  Tienes  miedo al que dirán.
  • Haces lo que los demás quieren que hagas y esperan de ti. Pero cada vez te pesa más.
  • Sientes y sabes que tienes que cambiar muchas cosas pero no sabes por dónde empezar.
  • Te gustaría parar y hacer un proceso de autoconocimiento, para cambiar viejos patrones y estructuras mentales y emocionales, que ya te pesan mucho, y empezar a VIVIR con letras grandes. A VIVIR.
Isidro Tresgallo Abascal

Acompañamiento Terapéutico Individual

Te acompañaré en este proceso personal desde la escucha, la empatía y el no juicio.

Siguiendo tu propio ritmo y necesidad, pondrás voz a lo que te ha traído hasta aquí, a lo que te está incomodando, a tus dificultades y sobre todo al ¿cómo estás y qué necesitas?. Es necesario ver el síntoma con el que acudes a terapia. 

Uno de los puntos importantes al empezar el trabajo terapéutico es la confianza, la tranquilidad y el ir dando espacio y expresión a todo lo que tienes internamente y necesita ser “expresado y escuchado”. 

 

Me gusta el trabajo terapéutico con muñecos (play mobil) en sesión individual, ya que son una herramienta que da mucha claridad y aporta mucha informacion, para ver cómo estamos en relación a … (lo que queramos trabajar).

 

Acompañamiento terapéutico individual

¿Qué conseguirás?

  • Parar y darte un espacio de auto-cuidado. 
  • Mejorar la relación contigo mismo/a. La primera relación es con uno/a mismo/a.
  • Poner orden en tu sistema familar y ponerte en orden en tu sistema familiar. Sin orden estás en des-orden.  Y en des-orden las cosas no suelen funcionar bien. Trabajo, familia, pareja y vida…
  • Tomar toda la fuerza de tus raices familiares. Sin raices no hay alas (alguien escribió), para desde ahí, salir a la vida. 
  • Detectar más rápidamente tus pensamientos limitantes y tus bloqueos, y tener otra mirada hacia ellos para que no te limiten cuando aparezcan. Tener más consciencia de tu herida y legitimizarla. La flor del loto, bella y hermosa,  sale del lodo. Y cuanto más quieres huir de tu herida y tus traumas, más se te suelen presentar (te lo digo por experiencia). 
  • Aprender a decir SI  y NO, poniendo tus limites y haciendo las cosas para ti.
  • Vivir más plena y conscientemente. 

Preguntas frecuentes

¿Qué diferencia hay entre hacer talleres de crecimiento personal y terapia individual?

Buena pregunta. Lo ideal es hacer un mix. En el trabajo grupal, se potencian mucho los «darse cuenta» ya que el grupo es un potenciador en todos los sentidos. El enriquecimiento es brutal al hacer trabajo terapéutico grupal.
Y luego está bien llevar a terapia individual aquellas cosas con las cuales te has quedado a medias o te gustaría tener mucha más claridad y profundidad.

¿Cuánto tiempo necesito ir a terapia?

No hay un tiempo estipulado ni obligado de las sesiones que necesitas. Una persona, dependiendo de sus necesidades, de su tiempo de asimilación y de su implicación en el trabajo, podrá obtener resultados en un breve periodo de tiempo, y otra necesitará más tiempo y más confianza para ir asimilando el trabajo.

Está claro que cuanto más tiempo estés en un proceso terapéutico, más hondo llegarás a tu toma de consciencia y eso se notará después en tu día a día. Los procesos son diferentes y tu proceso es tu proceso.

Tomar  la gracia de la desgracia 

Alejandro Lodi